Hoy como todas las mañanas llegué al trabajo (un poco tarde... también como todas las mañanas) y me senté a mi computadora para comenzar otro arduo día de labores. (Lo de “arduo” es para añadir un ingrediente dramático) Pero primero lo primero: ¡Revisar mi correo! Por supuesto tengo dos direcciones, la de trabajo y la personal. El trago amargo primero, 3 correos: una convocatoria a sesión, el texto de un comercial para radio corregido en “Word”, una notificación de celebración de cumpleaños para el viernes.
Muy bien, ¡Ahora lo que me interesa! Clic derecho sobre un muñeco azul-verdoso con blanco con una cruz en el pecho. Comienza el ritual del “baile” del muñeco (“Icono” para los puristas informáticos) que danza de un lado a otro en la esquina inferior derecha de mi pantalla antes de parar victoriosamente y permitirme visualizar a través de una “ventana” la cantidad de correos en mi Inbox, y medir así cuanto me quieren mis amigos. Por supuesto, aparte de darme cuenta que mis amigos no me quieren tanto como yo lo pensaba, tengo un buzón inundado de “confirmaciones” sobre un viaje a Bahamas, ofrecimientos de títulos universitarios sin estudio, el pago mágico de todas mis deudas de por vida, precios especiales en tratamientos dentales, y (ehem) titulares que curiosamente abusan del uso de las “x”. ¡Bienvenido al mundo del spamming!
Así que después de borrar los 30 correos electrónicos “chatarra” y leer los 2 correos restantes, que al final resultaron ser un “forward” que recibo por enésima vez y una notificación de virus cortesía de un amigo preocupado, procedo a chequear mi lista de “Online Buddies”. Usualmente saludo con un “Buenos Días” a los que me interesan e ignoro a los restantes. Y sí... ¡Lo acepto! Una que otra vez he bloqueado a alguien a quien le debo un favor ó con el que por alguna de esas razones de la vida... ¡No tengo ganas de hablar!
¿Cancel?, ¿Retry?... “¡Retry!”
“Seguro es algo temporal”. Segundo intento. Nuevamente el mensaje.
Mmmmm. “Claro, problema del servidor de la agencia”. Llamada al encargado de computo: Aclaración de que no existe ningún problema.
Un momento. No hay messenger. ¡No puede ser! Por favor sin pánico. De todas formas sé que no lo necesito, hace cinco años ni siquiera tenía conexión a Internet.
Pero el tiempo pasa y me siento sólo. Esa cruz en el pecho de mi amiguito azul me molesta. Igual sigo con mi rutina de trabajo, pero me siento extraño. ¿Qué me está pasando? Un día sin messenger y siento que me desconectaron del mundo. No quiero pensar que pasaría si el ( o “la” – como quieras llamarla -) Internet llegara a desaparecer. ¡Si recién nos estamos haciendo a la idea de la vida sin Napster! Pero pensándolo bien, realmente no es que lo necesite. ¿O si lo necesito?. Quizás todo tenga una explicación “freudiana” que tiene que ver con el hecho de nacer conectado. No lo sé a ciencia cierta. ¡Pero algo me falta!
Empiezo a pensar que todo esto es una conspiración de Bill Gates, ¿Será Gates la encarnación más clara de la maldad desde Damián en “La Profecía”? O simplemente a alguien se le ocurrió jugar una broma y dejar a 200 millones de usuarios sin comunicación. Por lo menos hoy no lo sabré, pero lo que sí sé es que no pude comunicarme con mis amigos en Honduras, preguntar a una amiga en Ecuador como le fue en sus clases, y seguir una plática pendiente con un nuevo amigo en Kosovo. (Bueno, esa última no es cierta, Pero igual podría pasar.)
Se lo que se siente, justo hoy estuve sin el especial Outlook...la primera media hora pense: la excusa perfecta para ignorar a algunos coworkers y evitar tener que buscar soluciones...pero que horror! en una hora fui personalmente a buscar auxilio (llame a los informaticos) pero se llevaron TODO EL DIA y NUNCA se arreglo el problema...termine enviando uno que otro mensaje desde mi correo personal en hotmail! Fue tragico! Lo mas tragico es saber que eres el UNICO en todo tu alrededor que esta incomunicado...y ver como los demas se pasan su dia normal!! Jaja que pasada!!
ReplyDeleteEl messenger es de lo mejor que nos ha ocurrido a esta generación y nadie lo puede negar!
ReplyDeleteEstá muy entretenido el comentario, me reí mucho..será que me identifiqué!?
Saludos Roger!
Messenger, mas que puristas, los informáticos somos los que realmente entendemos la importancia de esta aplicación,
ReplyDeleteque si bien podemos referirnos a ella con términos "técnicos" que podrían para los demas menguar su importancia, es para muchos el motor de sus trabajos (digo trabajos para no referirme al único lazo con vida social de algunos en esta rama).
Se ha convertido en una forma de vida y comunicación...
Como una especie de código en la que se envuelven las emosiones, y en ocasiones no se dan cuenta de Qué es real y qué no lo es...
En nuestra actualidad empiezas a escuchar de relaciones que empiezan en algún sitio electrónico y que el msn, se vuelve en centro de contacto..
para muchos es preferible una "relación" en la que como en una película que vi alguna vez(¿) nunca llega a hacerce un intercambio de fluidos, sino solo comunicación, donde no importa que tan alto o bajo sea una persona, eres tan genial como ágil en tu escritura...
en donde de forma extraña pueden sentirse inclusive enarmorados de personas que ni siquiera saben si son reales o si sólo se tratan de máscaras que se escudan en un aplicación que sin duda alguna a venido a Cambiar por completo los parámetros de la comunicación; de lo permitido y de lo que no lo es...