Monday, August 14, 2006

Generación NoXtalgia


Hace unos meses salí con un grupo de amigos y pasó lo que pasa con frecuencia siempre que me reúno con un grupo de “contemporáneos”: Terminamos hablando de los dibujos animados que veíamos de niños.

Todo comienza con un simple comentario como: “¿Te acordás de Heidi/Candy/José Miel?” Y de ahí en adelante comienzan una o dos horas de discusión sobre detalles, personajes, historias, recuerdos y en mi caso (para desgracia de los presentes) un repaso de las canciones de cada show con interpretación incluida. (Sí, me sé la de José Miel. ¡Y en japonés!)

¿Otra prueba de nostalgia? ¡Las discusiones sobre la moda de los ochentas! ¿Jeans “Acid Wash”? ¿”Copetes”? ¿Corbatas delgadas? ¿"Blazers" blancos? Todo se discute: En que momento se usó, para que ocasión, con quien se salía en el momento y que artista dictaba la moda. Otras dos horas de nostalgia garantizada... al ritmo de Rick Astley.

Y por supuesto que todos los "treintañeros" hemos recibido ese “forward” que medita “lo viejos que estamos” mientras se compara la vida de los niños de ahora con la de nuestra niñez.

¿Pero como hemos caído en esta pasmosa nostalgia? ¡Somos jóvenes! ¡Hace poco estábamos de moda! Nosotros vimos nacer MTV y conocimos de Michael Jackson antes que colgara bebés en los balcones. De niños y adolescentes jugamos con Transformers y Cabbage Patch Kids, estrenamos los primeros pantalones Guess?, nos uniformamos con Tennis Reebok negros y no nos dio pena alguna lucir medias blancas y pantalones apretados en los tobillos. En secundaria confiamos en la revolución del movimiento Grunge y cantamos el "Cuando seas Grande" de Miguel Mateos. Y ya en la universidad presenciamos con horror el nacimiento de las “Boy Bands” y de Britney Spears con nuestras camisetas Tommy Hilfiger bien puestas.

Pero estamos en siglo XXI, la revolución Grunge es ya sólo un recuerdo, crecimos sin llegar a ser "estrellas del Rock n'Roll o presidentes de la nación" y la moda de los ochentas se ha convertido en una especie de caricatura sobre los excesos de la década.

Nunca tuvimos un “Vietnam” y menos un “9-11”, y aunque vimos caer el comunismo no fuimos nosotros los que luchamos por lograrlo. A estas alturas parece ser que cualquier trazo de nuestra rebeldía… fue genuinamente sin causa.

Pero no carecemos de relevancia. El vivir “ensandwichados” entre los adinerados-exitosos- maduros “Baby Boomers” y los prometedores-liberales- tecnificados miembros de la “Generación Y” nos permite compartir la influencia económica de los primeros y la actualización de los segundos. Claro, esto refuerza la razón de ser de nuestra denominación “X”: Individualistas que buscan identidad (¡aún!) mientras viven bajo la sombra de generaciones aparentemente más pujantes.

Y no es extraño que buena parte de nuestros recuerdos vengan de la televisión. Somos realmente la primera generación totalmente mediática y presenciamos el inicio de la globalización. Aunque no nacimos con Internet, alcanzamos a “montarnos” en la red y a madurar junto a los nuevos medios sin quedarnos atrás. Por eso, a pesar de todo, nos llevamos con los mayores y entendemos a los menores. Eso sí... juntos pero no revueltos.

De repente no es tan malo el no tener una noble causa generacional que recordar, sobre todo si esto implica que no tenemos que cargar con la culpa de no haber logrado un cambio.

Así que sólo nos queda disfrutar la nostalgia de la TV. Por cierto… ¿Se acuerdan de Ulises 31?

6 comments:

  1. Anonymous3:28 PM

    Es un hecho que las generaciones X o Y nos dejan enseñanzas, como dices también nos dejan grandes nostalgias, por ejemplo a mi encantaba Heidi, copo de nieve, el abuelo cuando Heidi se sentaba en sus regazos (qué ternura!)
    En fin, a mi me hubiera encantado vivir en una montaña como esa y ser libre como un pájaro de mar!
    Ah, y también estaba enamorada de Ulises, de Koyikabuto, de Rick Asley, excepto de Michael Jackson ... (I don't like gay people).

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  2. Anonymous4:45 PM

    No sé si sy más viejo que vos... pero aparte de las cosas que mencionas... Memín, Kalimán y otros pasquines son -también- parte de nuestra generación...

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  3. Anonymous9:10 PM

    Uuulisses, Ulises,
    va volando por las galaxias
    mas veloz, que una estrella fugaz...

    Yo soy Nono el pequeño robot, su amigo fiel

    ULIIIIIIIIIISSEESSS!!

    Jaja! Yo tambien recuerdo cabal las canciones de mis preferidos :)

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  4. Bueno Pedro, te quisiera decir que soy mucho menor. Pero no. La verdad sí me acuerdo de Memín y Kalimán, aunque le seguí más la pista a la vida del primero. Lo único es que después de unos cuantos tomos de esa "profunda lectura", me deprimieron los temas. Si mal no recuerdo, aunque Memín amaba a su mamá, vivía en la peor de las miserias, otro amigo tenía un papá carpintero muy trabajador, pero alcohólico (Ernesto), el otro una mamá "de vida alegre" (Carlos) y otro era un niño rico infelíz y malagradecido (Creo que se llamaba Ricardo). Eso sí, el que me acuerde de los nombres es casi tan preocupante como saberme la canción de José Miel.

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  5. Anonymous8:23 PM

    Hola a todos los modelos 70... Rogelio gracias por hacerme recordar una vez más que ya pasé la barrera de los 30... me acuerdo de José Miel y la Ranita de Metal, que estoy seguro que debieron ser primos, por que lloraban de la misma manera, por una mamá que nunca apareció... (maternidad irresponsable) Estoy a la espectativa de la movie de los Transformers en el 2007... vivan los 30... y más...

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  6. Anonymous10:48 AM

    Jorge Eduardo:
    No se si fue porque formaron parte de mi epoca, pero revisando los actuales comics, o como de deciamos "pichingitos" nada se iguala a la calidad de los nuestros como a los de hoy en dia.

    Gracias por traer al recuerdo!

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